lunes, 12 de enero de 2015

JARDÍN BOTÁNICO

EL JARDIN BOTANICO
Cuando se construyó la Casa Grande se crearon los Jardines de la misma.  Estos fueron diseñados por Arquitectos de Paisaje extranjeros siguiendo los modelos ingleses de la época.
Comprendían alrededor de 14 has. De Arboles, Arbustos y Plantas principalmente dela Zona Templada que pronto se fueron perdiendo al no resistir los rigores de nuestro clima cálido en exceso durante los Veranos.
De ahí nació la idea de repoblar el Jardín con especies adecuadas y en efecto Don Benjamín ordenó se adquirieran de muchas partes del mundo.
Por su puesto el fue el creador del que llegó a ser el Gran Jardín Botánico.  Y repito, la personalidad formidable de Johnston acaparó todos los créditos de sus empresas; pero como todos los hombres excepcionales, supo rodearse de elementos también excepcionales como Napoleón y sus Mariscales y apenas es justo y preciso señalar que quien hizo verdaderamente el Jardín Botánico de la USCOS fue Mr. Clarence F. Edmunds, químico que colaboró con Don Benjamín desde la fundación de la United Sugar Cies como Superintendente de Elaboración en la Fábrica de Azúcar y en la Destilería de Alcohol.  Y adicionalmente en el Jardín que desarrollo la multitud de árboles que poblaron la Ciudad y los Campos de Mochis.
Yo llegué a la USCOS en 1940 como Segundo de Mr. Edmunds y trabajamos juntos hasta 1956, año en que se retiró como Vicepresidente y que yo lo sustituí en todas sus funciones.
Continuamos así una labor técnica para dotar a la región de Arboles y Plantas adecuadas “para que la gente se sombreyara” como decía el eterno Don Antonio Sánchez.

Desde mucho tiempo atrás se había seleccionado al Laurel (Ficus nítida) por su belleza y grandiosidad y la Palma Real (Roystonea regia) como plantas decorativas, pero observamos la declinación del genero Ficus ocasionada por la elevación del manto freático en la región con el uso de agua abundante de la Presa Miguel Hidalgo y cultivo libre del Arroz, y se inicio la búsqueda de especies mas adecuadas. Una de ellas fue el Fresno (Fraxinus pringley) que es muy solicitado y la otra el Olivo Negro Busida buserus) árbol precioso originario del Noroeste de México, ejemplar original que se encuentra en la Sección “E” y que es ancestro primigenio de TODOS los Olivos Negros de la región.

HISTORIA DE LA CASA GRANDE

LA CASA GRANDE
Tenemos a la vista los vestigios de lo que fue esta construcción. Y en mis archivos los Planos de la misma.
Dicha finca no fue precisamente modelo de la arquitectura residencial de los Estados Unidos. 
No  tenía ninguna semejanza con las clásicas mansiones sureñas con sus frontispicios griegos de altas y esbeltas columnas. Mas bien se asemejaba a las rusticas estancias europeas, de planta cuadrada, adicionada, eso si, con el sinaloense portal de tela de alambre, con marco de herrería, para evitar los mosquitos e insectos propios de la tierra caliente y húmeda.
Fue construida en 1908 cuando se constituyo la United Sugar Cies formada con el Ingenio del Aguila en Ahome y el Ingenio Mochis que inicio operaciones en 1903. Reunía, por supuesto, las comodidades posibles de la época tales como Agua tratada, abanicos eléctricos, solario y piscina interior, y cuarto frio en la Cocina a base de barras de hielo.
Fue hasta 1940 que se instalo un pequeño elevador a la Planta Alta para uso de Doña Inés, muy anciana, que resentía subir por la escalera monumental de la Sala Principal.
Nada extraordinario si se compara con las comodidades de múltiples residencias de la actualidad.
Lo mas notable en todo caso era la Sala Monumental de donde arrancaba, a ambos lados una escalinata a la Planta Alta, con barandal de hierro forjado (no había en esa época soldadura eléctrica) procedente de Florencia Italia. Dicha sala tenia cuatro elementos significativos: un gran Domo de cristal emplomado, un gran Piano de cola, de concierto, un hermoso Reloj de Pie y una gran Pintura al oleo de famoso pintor italiano del Siglo XVIII, todo de origen europeo.
En esta sala tenían lugar las grandes fiestas de la Casa Grande –verdadero hogar de Don Benjamín- que solía ofrecer a sus funcionarios, a la sociedad de Los Mochis y a distinguidos visitantes de USA y de la Capital; sobre todo en Noche Buena, Año Nuevo y Carnaval.
Junto al piano tenia la Sra. Johnston un gabinete con obras en papel pautado de las mas famosas composiciones de los músicos mexicanos de la época de las que era muy aficionado Don Benjamín, especialmente de las de Manuel M. Ponce y de música folklórica. No podía faltar en esas fiestas la Orquesta de Tirso Robles interpretando su pieza favorita: “Jesusita en Chihuahua”
Era notable también la magnifica biblioteca conteniendo varios millares de obras clásicas y populares, por supuesto en idioma Ingles...
Todas las paredes eran de ladrillo cocido, gruesas en extremo, forradas de madera de cedro. Los pisos de la Planta Baja eran de cemento pulido cubiertos de grandes alfombras y tapices persas y las de la planta alta de duela de madera, también de cedro.